No es que yo sea paranoica, qué va, pero me dio tanto miedo que la dentista a la que iré por primera vez no me haya atendido el llamado con un tranquilizador "consultorio tal, buenas tardes"...
Será una sádica del dolor ajeno, que se mudó adonde antes había un consultorio, con el macabro fin de asesinar a incautos a puro torno??
Si notan que este es mi último posteo, ya saben qué pasó...